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Ser inmigrante es un reto, pero ser un inmigrante miembro de la comunidad LGBTQ+ se vuelve un reto doble, eso lo sabe perfectamente Viviana Santibáñez, activista en pro de este grupo en Toronto, quien junto a varios colaboradores brinda apoyo a los recién llegados por medio de VIVIR, una asociación que durante varios años ha dado refugio y ayuda a varias personas.
Tuvimos la oportunidad de platicar con ella.
Viviana platícanos de dónde eres originaria y hace cuánto llegaste a Canadá.
Soy originaria de una región entre dos estados de México que se llama Tierra Caliente. Es difícil decir de qué estado eres porque naces en uno pero creces en el otro porque están a la par.
Llegué a Canadá en septiembre del 2018, mi primer invierno en el 2018.
¿Qué te inspiró a defender y hablar por la comunidad LGBTQ+?
Yo tengo bastantes años trabajando con la comunidad, mi activismo comenzó en los Estados Unidos en el año del 2009 en el estado de Texas, específicamente en la ciudad de Houston.
El primer activismo fue alrededor de las comunidades que viven con VIH. Trabajando con las comunidades marginadas me di cuenta que existían otras comunidades aún más vulnerables como las mujeres trans y las personas refugiadas o inmigrantes, entonces ahí empezó mi trabajo y lo hice por mucho años en diferentes organizaciones. Tuve puestos en diferentes comités de la ciudad bastante importantes que tomaban decisiones y luego tuve la oportunidad de trabajar con instituciones de gobierno hasta el 2018 que decido llegar a Canadá.
A Canadá yo llegué como una persona refugiada, el tiempo que yo me mudé fue cuando estaba la era de Trump, que fue bastante dura con las comunidades inmigrantes especialmente con los activistas y ni mencionar con las comunidades trans.
Empiezo mi proceso de refugio en el 2018 y he ahí cuando me encuentro con los primeros obstáculos, al no encontrar servicios o apoyos, ni siquiera instituciones que apoyaban directamente a la comunidad latinxs.
Me doy cuenta que hay una necesidad muy grande y que la población Latino-Hispana de miembros de LGBT es bastante grande.
Durante el proceso empiezo a trabajar en todo esto y con lo que yo iba aprendiendo era como yo iba ayudando a los miembros de la comunidad, les iba compartiendo información que yo iba obteniendo durante mi proceso para guiarlos.
El grupo empezó a crecer hasta que llegó un momento que los chicas y chicos empezaron a decir “oye habría la posibilidad de empezarnos a reunir, muchos estamos sufriendo de estrés, estamos sufriendo depresión, no tenemos amistades y queremos un lugar donde podamos ir no solo a tomar alcohol o divertirnos, un lugar tranquilo y seguro”, les dije que sí. Pero, tuve que esperar hasta agosto de 2019 cuando pude comprar un departamento para poder hacer las reuniones, ahí es donde nace todo. En mi apartamento hemos llegado a albergar hasta 50 personas.
Hoy en día somos cas 160 miembros activos en lo que es VIVIR.
¿Qué significó para ti recibir el premio de los hispanos más influyentes de Canadá?
Es un poquito difícil de contestar, ¿qué significó para mí personalmente? La verdad es un gran logro porque te llenas de orgullo de ver que la comunidad Latino-Hispana está reconociendo el trabajo que estás haciendo y no te están reconociendo por ser una mujer trans o por ser una persona de la comunidad LGBTQ+, sino que te están reconociendo el trabajo que estás haciendo y cómo estás inspirando a la población en general.
Significó bastante en otro aspecto porque esto les da la oportunidad a otros miembros de la comunidad a soñar, a tener esperanzas de que no los van a rechazar, no les van a prohibir y les van a reconocer su trabajo.
¿Cuáles son los planes que tienes?
Estamos trabajando bastante duro para fortalecer a la comunidad, especialmente tratar de ayudarles en las problemáticas que tienen que ver con la vivienda. Una de las cosas que ya estamos planeando y trabajando en eso es convertirnos en una organización Non-Profit para poder ayudar en la forma más responsable y profesional, pero también tener la oportunidad de que las comunidades y las personas se acerquen a donar para estas comunidades. A la par de esto esperamos tener una casa de asistencia, donde los miembros de la comunidad tengan un techo donde dormir y tengan un espacio donde puedan comer comida calientita, donde puedan resguardarse y puedan estar seguras y seguros durante sus primeros meses de proceso de aplicación de refugio, que son los más vitales e importantes para estas personas.
Como comunidad no estamos exigiendo nuevos derechos ni estamos pidiendo nada que no nos pertenezca como seres humanos, solo estamos tratando de tener las mismas oportunidades que los demás.
¿Qué mensaje le darías a los nuevos inmigrantes de la comunidad LGBTQ+ qué llegan a Canadá?
Lo más importante es que por favor nunca se sientan solos, que existe una comunidad Latino-Hispana enorme aquí en Toronto, que busquen grupos de apoyo, que busquen organizaciones, que busquen información, que se acerquen a las redes sociales o plataformas informativas que tienen conexiones donde de pronto se les puede compartir un correo electrónico o un número de WhatsApp con quien comunicarse.
Si son nuevos en el país y están pensando en hacer una petición de refugio o ya están haciendo una petición de refugio por favor asegúrense de estar trabajando con profesionales para no ser víctimas de engaños, lo barato siempre sale caro y en muchas ocasiones ni siquiera tienen que pagar por un representante legal para hacer un proceso de refugio, especialmente si es en la provincia de Ontario.
Sobre todo, si son miembros de la comunidad LGBTQ+, busquen personas que sean sensibles con estos temas y que tengan esa experiencia.
Aquí en VIVIR siempre van a tener un espacio para encontrar ayuda de cualquier tipo y si no la tenemos, vemos cómo le hacemos pero jamás vamos a dejar desamparado a nadie que necesite apoyo.