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Chirrinchi (Colombia)
Es el licor del desierto guajiro y se hace a partir de un destilado de panela (un dulce que viene de la caña) y comúnmente se elabora en recipientes de cobre.
Esta bebida es bastante fuerte y contiene un alto grado de alcohol, así que se debe probar con mucho cuidado.
El pueblo indígena Wayuu lo produce y lo bebe en las celebraciones.
Pozol (México)
Los mayas de Tabasco elaboraban esta bebida a base de maíz y cacao, lo llamaban «pochotl».
Además, es muy parecida y popular en zonas de Tabasco y Chiapas, pues no solo quita la sed, sino que tiene un sabor delicioso y es un alimento muy nutritivo.
Tradicionalmente se sirve en jícaras o cubiertas de coco, se endulza con azúcar y unos hielos, y hay quienes eligen agregarle un toque de canela.
Aloja de algarroba (Sudamérica)
Esta bebida es muy tomada en el norte de Argentina y en la región de Antofagasta, en Chile.
Se elabora con un fermentado de algarroba y agua al cual se le agrega azúcar para endulzarlo.
Además, existen otras variantes, por ejemplo, en las zonas de Tucumán y Catamarca también se prepara una aloja de membrillo y en Chile existe una versión de aloja de culén, al que se le agrega aguardiente y se bebe en las celebraciones.
Chicha de Jora (Perú)
Esta bebida típica y ancestral de Perú se prepara a base de maíz germinado. Los expertos la clasifican como una especie de “cerveza de maíz”.
El grado de alcohol varía y depende de la persona que lo prepare.
Se consumen en todo el país, sobre todo en las zonas rurales de la sierra y costa norte.
La chicha de jora se sirve en jarras de barro y se toma en envases fabricados de calabaza a los cuales se les llama “poto” o “cojudito”.